Todos hablamos de las blancas sonrisas que fabrica Hollywood. La imagen repetida de esas bocas que se ven en las publicidades no solo se han convertido en una necesidad estética, sino también psicológica.

Muchos tratamientos caseros de blanqueamiento no tienen capacidad terapéutica” afirma el doctor Óscar Castro Reino, presidente del Consejo General de Colegios de Dentistas de España. “La publicidad es engañosa” Existen anuncios en televisión

que prometen un blanqueamiento de hasta ocho tonos, eso es imposible. “Lo ideal es acudir al dentista y ver qué se puede hacer para blanquearlos y, sobre todo, descartar alguna patología previa“, agrega.

Lo primero que tenemos que saber es que los dientes no son blanco perla por naturaleza. Existen dos componentes que le dan su color: La dentina que es de color amarillenta y el esmalte que es de color traslucido que hace que el color amarillo de la dentina disminuya y se vean más blancos, sin embargo existen otras razones por las cuales tus dientes se ven mas amarillos. Te invito a interiorizarte en las causas.

Causas Genéticas

Existen estudios que demuestran que tener los dientes amarillos se debe a condicionantes genéticos que predisponen ya al individuo a tenerlos así. Los genes influyen en el color de los dientes y en cómo evolucionan con el paso del tiempo. Hay personas que tienen unos dientes más blancos que otras porque sí, así como una mayor transparencia de la dentadura o un mayor grosor. Pero hay otras, que por genética, tienen menos esmalte y por consiguiente sus dientes ganan más tempranamente un tono amarillento o grisáceo. Siguiendo esta línea, hay enfermedades congénitas como la dentinogénesis o la amelogénesis imperfecta que provocan defectos en el esmalte o en la dentina, haciendo que estos adquieran un color amarillento o incluso marrón. Es un proceso que se hereda de padres a hijos.

Envejecimiento

Otro de los factores relacionados con las causas de los dientes amarillos es la edad. Es normal que con el paso del tiempo y a medida que se cumplen años, la dentadura se vuelva más amarilla u oscurecida debido al deterioro y desgaste que sufre el esmalte dental.

Medicamentos

Existen ciertos medicamentos que pueden provocar que los dientes se pongan de un tono  similar al gris o marrón. Es el caso antibióticos del tipo tetraciclina y doxiciclina, los antidepresivos, antihistamínicos y aquellos destinados para tratar la presión arterial elevada.

Cuidados con nuestra dieta

Cada diente tiene dos partes fundamentales: el esmalte (la capa exterior) y la dentina (la parte interior) como mencionábamos anteriormente. El esmalte se va desgastando por el uso, lo que permite que una serie de alimentos terminen por ir manchando progresivamente la pieza dental. Veamos las bebidas y alimentos que pueden amarillar los dientes.

Bebidas

 Tanto el café como el té negro son las bebidas más populares en el imaginario colectivo. Pero sin embargo, existen otras como el té verde,  el vino tinto o los refrescos de cola azucarados que también contienen una pigmentación capaz de amarillentar los dientes.

Por otro lado, en algunos lugares el agua contiene unos altos niveles de flúor y esto puede causar un incremento de la fluorosis, desencadenante de manchas en los dientes.

Alimentos

 Entre los alimentos que manchan los dientes comúnmente encontramos aquellos ácidos como los frutos cítricos o el vinagre. Se suman  los que contienen el caroteno, un antioxidante natural, que se encuentra en las espinacas, los tomates y las zanahorias.

Mala higiene dental.

Una inadecuada higiene dental puede ser la causa. No cepillarse los dientes varias veces al día provoca una acumulación de placa bacteriana que acaba convirtiéndose en sarro y dando lugar a ese tono amarillento tan poco estético. Recuerda la importancia de realizar una buena limpieza bucodental a diario, acudir al dentista con frecuencia para realizarte una revisión.

El Tabaco

Aunque para muchos no sea una sorpresa, también podemos tener los dientes manchados y marrones por fumar. En el transcurso del tiempo, los productos de tabaco, desde cigarrillos y humo de pipa hasta tabaco masticable, pueden manchar y oscurecer los dientes.

 

No podemos frenar el paso del tiempo, pero sí podemos poner cuidado en la limpieza de nuestros dientes, además de evitar consumir en exceso ciertos alimentos o bebidas (y, por supuesto, el tabaco). Esto no sólo contribuirá a mantener nuestros diente lo más blancos posible sino que también nos ayudará con nuestra salud en general.